Saturday, September 24, 2005

Resumen Semanal.

Estoy en el Terminal Alameda. Me acabo de tomar el último McSwing en la capital y estoy viendo lo que hace la gente al lado mío. Tengo a mi derecha a una niña de unos 11 años que revisa su mail y escribe con una mano en el teclado. En estos momentos revisa la web de "La Ley de la Selva". Ahí está la juventud, querida María José Quintanilla. Gracias por cagarnos a todos.
A mi izquierda hay un ventilador que trata de camuflar el aire denso que corre por este ciber sin audífonos. No hay música. No hay libros ni revistas. Este viaje va a ser puro aburrimiento.

Hoy N Copano me invitó a El Mañanero. Lo pasé excelente, gimiendo al aire y haciendo miles de cosas. Valió la pena levantarse temprano.
Desperté a las 7 AM gracias a los dos despertadores que programé, así que no llegué tarde gracias a eso. De hecho, llegué un par de minutos antes que el propio Nicolás.

Hice de una tipa que gemía en una supuesta película porno. También fui la hija del "Hombre Sin Fortuna". Fue chistosísimo. Luego pude decirle a Zombie que lo había visto el jueves en el Emporio La Rosa (luego les hablaré de aquel mítico lugar) y hablé con varios más.
Los dejo ahora porque mi bus llegará pronto. Tengo ganas de que se me pase. Estas cosas santiaguinas. Pero whatever, volveré igual.




Pronto, más info, con la mirada Stf (parodiando a R&P Alerta). No será la continuación de "...trepa por Santiago" sino que algo más evolucionado. Ojalá. Nos veremos cuando llegue a la Papaya Central.

Hoy había Marcha por el Orgullo Gay en la Plaza Baquedano según entendí gracias a Buffet. Espero que hayan ido hartas personas porque yo no pude ir. Para el próximo año será. Siempre tendremos el mañana. Pero qué frase más pelotuda.

Thursday, September 22, 2005

Andanzas en la capital.

Disculpen. Los dejé muy botados, pero fue por falta de tiempo y - sobre todo - dinero. La plata se hace humo estando en Santiago y yo que no produzco nada, me estoy quedando con un par de monedas no más.
Pero bueh, lo importante es que la he pasado muy bien. Ahora que me ubico un poco mejor puedo ir a más partes. Pero ya me vetaron la entrada a la Biblioteca Nacional porque a la muy pelotuda que les escribe se le perdió el carnet. Ayer estuve más de 4 horas leyendo las Zonas de Contacto antiguas y me daban unas tremendas ganas de escribir tan excelentemente.

Me están pidiendo columnas y tengo que escribir porque tengo hartos temas. También tengo que terminar el ensayo para el segmento de FM Tiempo que definitivamente se va a llamar Paciencia, ¡Solo tenemos 14! como una manera de recordar tiempos en los que existía el blog. Cada vez que me aucerdo del idem, me pongo a pensar en que pudo haber sido una gran página y que nos quedaban tantas cosas de las que hablar...

Bueh, ya pasó eso, Estoy escuchando el jingle de Joaquín Lavín en este ciber de la Alameda, cerca de la Biblioteca Nacional , como maldiciendo a los idiotas que no me dejan entrar.
Anduve de visita en FM Tiempo y pude saludar a todas esas personas que me caen excelentemente. Ahora mismo están dando Fonosíntesis, el programa de Sergio Cancino, un tipo que se las trae.
Cuando vuelva a La Serena me espera una prueba de Biología, para la cual no he estudiado nada. Genética y esas cosas, puaj.

Hay que estudiar, pero cuando llegue serán esas cosas. Después de todo, si estoy de vacaciones algo habrá que aprovechar, ¿No?

Wednesday, September 14, 2005

OpineComenteHableExprese

Ya. El martes tuve el segmento y hartas ideas necesito para el próximo programa. Necesito que en los comments, ustedes escriban sobre qué les gustaría escuchar, y que temas se podrían abordar. Recuerde que son temas adolescentes y de las cosas que a nosotros nos interesa comentar. Porque si usted no opina, no comenta; si no comenta, no habla; y si no habla no se expresa. Es así como les pido de la manera más barsa que dejen sus deberes un rato y piensen en qué quieren escuchar, que quieren que comente Stf. Porque después van a ser ustedes los que estarán en los medios, comentando y contraargumentando, y quiero hacerme partícipe de sus propuestas. Incluso puedo mencionarlos como gestores de la idea.

Otra cosa que sería interesante sería ponerle nombre al segmento, algo que lo identifique y que englobe el enunciado "Niña de 14 que comenta temas de contingencia adolescente". En marcha.

La cuenta regresiva comienza hoy. Mañana veremos cine en Lenguaje y el viernes supuestamente me largo a Santiago. Ustedes no pueden librarse tan pronto de mí. Y yo tampoco me puedo librar de ustedes, así que haga valer sus pensamientos y comente!

Sunday, September 11, 2005

Cosas Dispersas Que Ya Pasaron.

Nostalgia. "Tristeza melancólica por el recuerdo de un bien perdido", dice el Diccionario.
La gente piensa que yo no soy melancólica porque siempre estoy pensando en lo que pasa y en lo que pasará. Nunca en lo que pasó. Y es algo bastante errado, porque muchas veces al día estoy revisando cosas que hace mucho tiempo hacía o escribía, y es entretenido ver cómo te has desenvuelto en el último tiempo.

Leo muchas veces mi diario de cuando tenía 8 años, en donde mi pretensión máxima era tener una casa club y ser la presidenta. Un club a lo Lulú, pero a menor escala. Todos los viernes nos juntábamos 5 niñas a comer porquerías y a hablar de los especímenes que nos molestaban. Es entretenido ver como una de esas niñas ahora va en un colegio en el que yo iba antes y se convirtió en lo que el pueblo quería. Otra, va en un paralelo a mi curso y desde que llegó que insiste en ser la Paris Hilton chilena. Otra, a la cual yo envidiaba porque a pesar de ser el deseo de todos los pendejitos hijos de mamá, era una tipa chora, que si decía: "Ámenme" todos lo hacían. Una tipa que mueve masas ahora se convirtió en parte de la masa.

Cuando yo tenía 8 años, me gustaban las Spice Girls y coleccionaba todo lo humanamente posible de ellas. No sé cuál era mi propósito, si cuando a mi me gustaban, a nadie más les causaban gracia. O sea, no tenía a quién presumirle mis artículos de colección. Fue entonces cuando me crei la antisocial (no confundir con rebelde), la que se sentaba al final de la sala y la que no pescaba al mundo por creer que era la reencarnación de Daria pero en versión poetisa. Creía que por haber recitado un poema sobre niños que pedían plata en la calle en una maratón de poesía, era la dueña del universo y todos debían besarme los pies. Disculpando la expresión: puta la hueona malcriá!

Cuando iba en Cuarto Básico (o sea, cuando tenía 8), tenía una compañera que había actuado en Marrón Glacé: El Regreso y salía en los créditos junto a Fernando Kliche y todos esos. Yo la envidiaba porque era regia y parecía como si en vez de ser compañera mía, era toda una mujer de Octavo Básico, al menos.
Después me arrepentí de mi envidia, porque ese mismo año no la volví a ver porque se quedó repitiendo. Ahora aparece en unas campañas publicitarias de VTR y cada vez que veo los carteles anunciando la Triple Banda Ancha, me acuerdo de ella.


Avanzando en el tiempo, me puse más tranquila. La tipa que organizaba los bailes y animaba todos los actos porque nadie más podía leer de corrido. Una tipa que quería tener opinión pero no sabía qué decir. Una tipa que se juntaba con las niñas nuevas porque las viejas ya la habían desplazado. No fue una época de negrura y amargura, sino que yo no me daba cuenta de todas las puñaladas por la espalda que me daban las niñas que supuestamente eran mis amigas y luego descubrí que sólo me querían porque me sacaba sietes en Inglés. Al menos una de ellas quedó con secuelas, ahora es una tipa fácil drogadicta que va a cuanta fiesta haya.

No es que yo sea un modelo o que todos mis compañeros salieron fallados, es sólo un rescate de los casos más emblemáticos. Los que quedaron grabados en mi retina y no se me van a olvidar. En los veranos, acostumbro hacer una lista enorme de todos los compañeros de curso que he tenido desde Primero Básico, mientras mi hermana lee sus apuntes de Derecho y mi mamá ríe al sol con una amiga.

La gente siempre tiene cosas que no le va a decir a nadie más que a su almohada. Y es por eso (creo) que siempre fui una persona más bien reservada. Si bien, hablaba con todo el mundo, a ese mundo no le importaba lo que hablara. Era como conversar con las paredes, que al menos si se enojan pueden temblar y hacerme asustar como en cada movimiento sísmico. Muchas veces tuve que lidiar con estas estatuas insensibles, pero ahora ya es un poco más diferente. De todas formas les deseo lo peor a algunos de mis compañeros, pero ya no es tan terrible como antes. Ya no me molestan por cosas como: huevona cállate, nadie te pesca (una de las frases que recordaré cuando me gradúe de Enseñanza Media cuando estos mismos tipos tengan la intención de darme un abrazo cínico) Sino que: eeella la columnista, ¿por qué no me mejor te vai a Santiago si tanto lo amai? Lindos preciosos, no se dan cuenta de que lo que me están exponiendo es exactamente lo que quiero.

Yo ya aprendí a medirme con mis compañeros. O sea, aprendí a callarme porque al hablar con ellos no saco nada más que un dolor de garganta severo. Así que prefiero decirles cosas importantes a la gente que en realidad me importa, a mi familia, a mis amigos, a los bloggers, a los que escuchan la radio.

A propósito de radio. Mañana va el segmento en FM Tiempo, para los que se extrañaron de mi ausencia (yeah, right). Hablaré de la presencia de los adolescentes en la televisión y de cuál es su verdadera importancia. Recuerden, a las 14hrs.

Los dejo ahora porque tengo que terminar de leerme el libro (No Logo) y hacer mi tesis. Las cosas surgieron, qué milagro.

Tuesday, September 06, 2005

Y volvimos.

El plazo se cumplió y Stf está de vuelta. Claro que hay varias cosas que pasaron. Como por ejemplo, lo del debate. Empatamos, lo que no está nada de mal para haber competido por primera vez con un Cuarto Medio con previa experiencia. Ambos tuvimos un promedio de 6,3. Así que estoy conforme con eso. Ahora pasamos a segunda ronda y estamos con un buen nivel.

Temas bloggísticos. Pucha, he querido postear toda la semana y de hecho, muchas veces rompí el pseudo descanso. Y no descansé nada, así que siento que más los defraudé a ustedes que a mi misma.

Estoy comenzando a creerme la tesis que me decía mi amiga Froda. Necesito estar bajo presión para cumplir con mis deberes. O sea, necesito que me anden vigilando, o que me reten de vez en cuando si no escribo una columna. Tiene razón. ¿Cuántas cosas no he hecho por culpa de que no me están exigiendo las cosas? Mm. No sé por qué hay cosas que no me puedo autoimponer aun cuando quiera hacerlas con todo el frenesí del mundo. No importa, son cosas y rollos adolescentes que supongo que en un momento dado tienen que pasarse. ¿No?

No es irresponsable la palabra, es como poco perserverante. O poco constante. Lo que pasa con el colegio y con el estudio. Son cosas que hay que analizar.

Pero yo quiero saber cómo están ustedes. A varios de ustedes no los he visto en una semana y quiero saber de las cosas que han escrito, porque - así como yo - tienen cosas que contar y yo ojos para leerlos (por ahora, después pueden ser oídos).

Y no niego que hay veces que me gustaría decir la palabra Vacación y que todo se transformara en eso, en un día feriado donde no existiera nada y pudiese dormir sin miedo. Pero ya llegarán esos días. Ahora hay que concentrarse en escribir y en decir cosas cuerdas.

El segmento se ha pospuesto porque JMV está enfermo. Así que todos mis "cuídate" para él y todos mis "tendremos que hacerlo mucho mejor" para mí. Tengo que hablar con los directivos y esas cosas. O sea, para que todos se enteren. Damn.

Las cosas con el curso ya no están tan horrendas. Porque ahora el foco de atención es una relación un tanto asquerosa y cerda. Pero bueh, las cosas van rotando.

Y lo que está muy relativo, es mi ida en Septiembre a la capital. Mi tía se va a la Argentina esos días así que estoy quedando a la deriva. Algo habrá que hacer, como decía mi amiga Rocío.

Lo bueno es que ya no tengo clases el sábado y esas son 6 horas más para pensar. Porque todavía quedan temas y días para permanecer aquí, hay que abrir bien los ojos y parar bien las antenas como decía Marcelo en tiempos donde Cachureos me despertaba cuando tenía 7. Pero de eso ya pasó la mitad de mi vida y habrá que comenzar nuevos capítulos. Nuevas historias, nuevas columnas, nuevos dichos, nuevos segmentos.

Nos vemos cuando todo surja.