Do the Evolution

Evolucionar. Me da miedo esa palabra, porque creo que a esta edad estoy forzada a crecer. Y puedo crecer de mil formas aún no exploradas, ese miedo a lo desconocido es lo que todos los humanos escondemos. Nos gusta lo tangible, lo real. Durante mucho tiempo vivimos pensando que lo único real es lo superficial (como cierta canción), y claramente no es así.
Cada uno de nosotros tiene su mundo, su realidad aparte, porque al final, todos somos unos autistas de mierda. Todos nos transformamos en alguien más cuando nos relacionamos. "No me metan a mí en ese saco, que yo soy firme y digo las cosas pan, pan, vino, vino" Patrañas. Inconscientemente creamos un caparazón para enfrentarnos al mundo, es el escudo que llevamos a todos lados.

Hay gente que no sale sin algún objeto valioso. Un collar, un reloj, qué sé yo. Son amuletos, dicen ellos. Pero no es cierto, y aquí puedo echarme a varios de ustedes encima: Tengan en cuenta que venimos desprovistos de cualquier prenda especial al mundo, y así vamos a terminar. No hay para qué tener un objeto predilecto, si, al final, de cualquier forma podemos desecharlo.

¿Por qué tan existencial? No sé. Quería hacer un post reflexivo y weirdo para después retomar lo mío. This is SO not mine. Pero las cosas no son tan fáciles. No puedes cambiar de la noche a la mañana, y de eso sirve la evolución. Cambio gradual a través del tiempo.

A esta edad no me sirven las experiencias ajenas. Necesito cometer mis propios errores para levantarme sola. Los testimonios provenientes de otras bocas sólo sirven como recomendaciones que al final nunca tomas. Porque nos gusta estar en el límite, para ver cómo se siente. Necesitamos de riesgos, para luego recapacitar y volver a nuestro mundo cotidiano. Necesitamos cambiar para volver a estar igual.


Stf.-